Creación de una economía azul

Un grupo de tiburones de arrecife de puntas negras se desplaza en círculos sobre un jardín de coral poco profundo en la Reserva Marina de Misool en Raja Ampat, Papúa Occidental, Indonesia.

Para los fundadores de tres centros turísticos de buceo de Indonesia, la misión era clara: proteger los recursos naturales de la región mediante la prestación de beneficios económicos, educativos y ambientales y facultar a los residentes para participar en el proceso. Estos visionarios abrieron un camino para una “economía azul”, lo que garantizó un uso sustentable de los recursos de los océanos y promovió el crecimiento económico y una mejora de los medios de vida de los habitantes del lugar.

LEMBEH RESORT, CÉLEBES SEPTENTRIONAL

Soluciones sustentables

"Conservaciónsustentabilidad y comunidad son tres palabras que al centro turístico Lembeh Resort siempre le han apasionado”, afirmó Danny Charlton, cofundador del centro de buceo in situ del centro turístico, Critters at Lembeh Resort.

Desde el principio, el fundador Alex Rorimpandey proporcionó capacitación y dio empleo a personas que viven en los poblados cercanos en la isla de Lembeh. “Alentamos a los habitantes a valorar el entorno natural, tanto en la superficie como bajo el mar, así como también sus culturas tradicionales”, comentó Charlton, y agregó que los miembros del personal del centro turístico también tienen la posibilidad de obtener su certificación de buceo. “Esperamos que esto promueva una mayor apreciación de nuestros singulares y preciados ecosistemas submarinos”.

Haciendo historia

Hace veinte años, Rorimpandey, un nativo de Tondano, Célebes Septentrional, construyó una cabaña con vista al estrecho de Lembeh. Tenía pensado construir una casa de vacaciones para su familia, pero para diciembre de 2002 la propiedad ya incluía tres cabañas para huéspedes. Critters at Lembeh Resort comenzó a llevar a huéspedes a realizar buceos en el estrecho.

Rorimpandey también donó materiales para construir la iglesia local del pueblo vecino Pintu Kota Kecil, lo que sentó las bases de un vínculo sólido entre el centro turístico y las personas de la isla de Lembeh.

Un legado perdurable

Rorimpandey murió en julio de 2003, pero su esposa e hijos conservaron la propiedad del centro turístico y hoy en día mantienen una participación activa en su administración. Las operaciones de buceo están administradas por Charlton y su esposa, Angelique, que es originaria de Célebes Septentrional y es la hija del fallecido Dr. Hanny Batuna y su esposa, Ineke, fundadores de Murex Dive Resorts.

“Murex Resort Manado, Murex Bangka y Lembeh Resort han colaborado por casi 18 años, y nuestro personal es como una familia”, afirmó Charlton. “Muchos de los miembros de nuestro personal han sido parte de la empresa por años —incluso décadas, en algunos casos”.

Lembeh Resort suministra energía eléctrica a la iglesia y la escuela dominical, que se encuentra en el corazón de la comunidad en la isla. También ofrece barbacoas a sus huéspedes, durante las que los niños de la escuela dominical realizan actuaciones musicales. “Los huéspedes pueden comprar una grabación del coro y lo recaudado es destinado a Lembeh Foundation, indicó Charlton.

Los huéspedes de Lembeh Resort contribuyen de otras maneras significativas a través de donaciones de artículos escolares, tales como crayones, papel, bolígrafos de colores, lápices, diccionarios y libros en inglés y accesorios deportivos. “Los uniformes escolares son obligatorios en Indonesia, y un equipo completo tiene un valor promedio de 55 dólares estadounidenses”, comentó Charlton. “Este gasto es bastante difícil de costear para algunas familias, así que aceptamos donaciones para ayudarlas”.

El próximo paso

El pueblo más cercano, Pintu Kota Kecil, está habitado por pequeños pescadores, agricultores de subsistencia y empleados de centros turísticos de buceo locales. “A través de Lembeh Foundation, hemos construido un banco de desechos que las personas pueden usar para generar ingresos”, comentó Charlton, “y estamos construyendo un centro de aprendizaje con una biblioteca ecológica, que esperamos terminar pronto”.

A pesar de la pandemia, el centro turístico ha permanecido abierto. “Seguimos comprometidos a seguir dando empleo y ayudando a la mayor cantidad posible de personas”, afirmó Charlton.

* * * * * *

MISOOL RESORT, RAJA AMPAT

Una poderosa alianza

En muchos sentidos, la creación de Misool Resort es una historia de amor. Poco tiempo después de conocerse, los cofundadores Andrew y Marit Miners tuvieron una tercera cita muy especial —un viaje de buceo a Raja Ampat. Allí exploraron la isla remota de Batbitim y descubrieron un campamento de cercenamiento de aletas de tiburón recientemente abandonado. Impactados, prometieron proteger este lugar del que se habían enamorado. 

Haciendo historia

Construir un centro turístico no estaba en sus planes iniciales. En 2005, Andrew se comunicó con los clanes locales y les pidió permiso para crear una zona de protección total y un centro de conservación. La pareja obtuvo la bendición de los líderes de las tribus locales y arrendó un área que ha crecido e incluye nueve grandes islas deshabitadas y los derechos del paisaje marino circundante de 1.191 km2 (460 millas cuadradas). Al darse cuenta de que un centro turístico en una isla privada podía financiar el trabajo de conservación que querían llevar a cabo desesperadamente, la pareja persuadió a los inversores para que compartieran su visión.

No obstante, antes de que el trabajo de construcción pudiera comenzar, era necesario negociar detalles del contrato de arrendamiento, comentó Jo Marlow, gerente de marketing y comunicaciones de Misool Resort. “Los límites del área arrendada se definieron tras una serie de reuniones municipales. El acuerdo incluía que la zona de protección total debía estar bastante lejos de los pueblos para que sus zonas pesqueras tradicionales aún estuvieran disponibles pero lo suficientemente cerca como para que los pescadores artesanales se beneficiaran del efecto derrame del resurgimiento de poblaciones de peces. Las partes acordaron un área donde históricamente había habido pesca ilegal de pescadores externos, incluso personas dedicadas al cercenamiento de aletas de tiburón”.

En papel se veía bien, “pero la comunidad no tenía los recursos ni la infraestructura necesarios para interceptar a los cazadores furtivos que estaban diezmando su herencia natural”, afirmó Marlow. Se creó una patrulla de guardaparques con personal local y “en la actualidad, la Reserva Marina de Misool (Misool Marine Reserve) es una brillante luz de esperanza”.

Un legado perdurable

En 2019, Misool Resort donó 358.950 dólares estadounidenses a Misool Foundation, una suma suficiente para dirigir la patrulla de guardaparques. El centro turístico también dona 100 dólares en representación de cada huésped y alienta a los visitantes a igualar su donación. Entre las dos organizaciones dan empleo a más de 169 miembros del personal, cuyo 95 por ciento es de origen indonesio. “Estimamos que estos salarios apoyan a 650 personas de la comunidad local”, manifestó Marlow. “Dictamos lecciones de inglés y ofrecemos capacitación laboral. También brindamos capacitación de buceo en aguas abiertas a aquellos miembros del personal de todos los departamentos que estén interesados”.

En 2011, con el apoyo de Seacology, Misool Foundation construyó un jardín de niños. “Nuestro compromiso con la educación se extiende a los pueblos de Yellu y Djabatan”, afirmó Marlow. “Empleamos a siete maestros locales, pagamos sus salarios mensuales y brindamos material de respaldo a cuatro escuelas locales”.

El próximo paso

El centro turístico está comprometido a reducir su huella de carbono y actualmente obtiene un 60 por ciento de su energía de fuentes renovables. También gestiona un jardín hidropónico, que se espera produzca cerca de dos toneladas de vegetales orgánicos en 2021.

“La misión del centro turístico de proteger los arrecifes más ricos del mundo es irrelevante si no tomamos medidas inmediatas y decisivas para reducir nuestras emisiones de dióxido de carbono y los efectos resultantes sobre el cambio climático”, explicó Marlow. “Nuestro objetivo es alcanzar la neutralidad de carbono para el año 2025”.

El centro turístico también desea aumentar su apoyo educativo para los niños locales. “Con frecuencia es difícil encontrar maestros que estén dispuestos a comprometerse con posiciones a largo plazo en esos lugares remotos”, comentó Marlow. “Nuestro programa educativo es una inversión a largo plazo en el futuro de Raja Ampat. Esperamos que un mayor acceso a la educación prepare mejor a la próxima generación para asumir roles de liderazgo que permitan preservar su herencia natural y cultural”.

* * * * * *

WAKATOBI DIVE RESORT, CELEBÉS SUDORIENTAL

Colaboración comunitaria

“En centro turístico Wakatobi Resort está rodeado de algunos de los sistemas arrecifales más inmaculados y mejor protegidos del mundo”, manifestó Karen Stearns, directora de marketing y relaciones con los medios de comunicación del centro turístico. “Además de preservar la gran biodiversidad de la región, el innovador programa de colaboración para la conservación del centro turístico se ha convertido en un modelo para el ecoturismo sustentable”.

Wakatobi a menudo recluta y forma divemasters
Wakatobi a menudo recluta y entrena a divemasters del poblado local.

Haciendo historia

Antes de que el fundador Lorenz Mäder abriera el centro turístico de Celebés Sudoriental en 1995, se reunió con los pescadores locales y los ancianos de los poblados de comunidades vecinas y les hizo una propuesta única. A cambio de aceptar respetar una zona de protección total en unos 6 km (4 millas) de arrecife, los residentes de 17 poblados del área recibirían pagos de arrendamiento directamente de Wakatobi. Desde entonces, la zona de protección total inicial se ha expandido y abarca más de 19 km (12 millas) de arrecife y actualmente es una de las áreas marinas protegidas de financiación privada más grandes del mundo.

“Estas zonas reabastecen poblaciones de peces ya que funcionan como zonas de reproducción seguras, lo que, a su vez, impulsa recolecciones sostenibles en áreas fuera de la reserva”, afirmó Stearns. “Los mismos pescadores que al principio se mostraban escépticos con respecto al programa, en la actualidad son algunos de sus más fervientes defensores”.

Un legado perdurable

Wakatobi Resort ha colocado boyas de amarre en todos sus puntos de buceo y ha proporcionado boyas adicionales en puertos cercanos para proteger más áreas del lecho marino. El centro turístico también suministra agua potable y electricidad a un poblado cercano, organiza seminarios de concientización comunitaria y compra y distribuye material escolar a escuelas del área.

El centro turístico da empleo a más de 100 personas de poblados vecinos y los habitantes locales ocupan aproximadamente el 90 por ciento de los puestos de trabajo del centro. “Estos puestos incluyen a empleados de hotelería, chefs, encargados de mantenimiento y jardineros, así como también capitanes de barco, tripulaciones y divemasters que han obtenido sus credenciales a través de nuestros programas de capacitación”, expresó Stearns.

Wakatobi patrocina limpiezas de poblados semanales que involucran a hasta 100 habitantes locales y trabaja estrechamente con comunidades y gobiernos locales en lo que se refiere a cuestiones de gestión de residuos. El centro turístico proporciona contenedores para residuos, organiza vehículos de recolección de residuos y patrocina el almacenamiento de residuos adicionales para la isla adyacente de Tomia; también financia a un equipo de 20 líderes e individuos muy respetados para ayudar a promover prácticas sustentables. Estos individuos utilizan su condición social para aumentar la conciencia entre el público respecto a la conservación de los arrecifes y la gestión de residuos.

El próximo paso

El legado de Wakatobi a la comunidad son pesquerías sustentables y prosperidad económica. “El centro turístico continuó con sus pagos compensatorios a los poblados locales, incluso durante la pandemia cuando no teníamos huéspedes”, manifestó Stearns. “Las personas que nos visitan pueden ser testigos de cómo un cambio positivo también puede suponer un beneficio económico y compartir la visión de nuestro fundador de crear un beneficio para todas las partes. Los turistas aprenden a apreciar un arrecife vivo y comprenden lo que se ha perdido en otros lugares. Ellos pueden contribuir con su visita y difundiendo el mensaje a otros. Ver cómo pueden cambiar la situación motiva a otras personas a proteger activamente los arrecifes en todo el mundo”.

* * * * * *

compra de productos en los pueblos
Bilikiki colabora estrechamente con las aldeas de su itinerario de cruceros para comprar productos locales que ayuden a sostener sus economías.

EMBARCACIÓN DE VIDA A BORDO BILIKIKI, ISLAS SALOMÓN

Los centros turísticos con sede en tierra no son las únicas entidades que trabajan con los lugareños para proporcionar incentivos económicos con el objeto de proteger los recursos locales. La embarcación de vida a bordo Bilikiki ha operado desde 1998 en otro foco del Triángulo de Coral, las Islas Salomón. Tradicionalmente, la tribu local es propietaria de todas las tierras y arrecifes adyacentes y el jefe de la tribu los controla. Desde el comienzo, la empresa propietaria de Bilikiki ha pagado para bucear en los arrecifes que visita. Esos pagos han impulsado a los jefes de las tribus locales a proteger sus arrecifes.

isleños que reciben atención oftalmológica
Bilikiki colabora con la Fundación Loloma para proporcionar atención odontológica y oftalmológica a los habitantes de las Islas Salomón.

El Bilikiki incluye una visita a la laguna de Marovo, donde los habitantes locales producen exquisitas esculturas en madera que los huéspedes pueden comprar. Desde su primer crucero, la empresa ha entregado semillas y luego pagado por los productos cultivados por los pobladores locales, quienes entregan frutas y vegetales frescos a Bilikiki mediante el uso de canoas tradicionales.

“Hay áreas remotas donde las personas dependen principalmente del desarrollo de cultivos y de la pesca de peces, por lo que poder establecer alguna pequeña forma de economía mutuamente provechosa es útil para todos”, afirmó Sam Leeson, director general de Bilikiki Cruises. “Esto permite que los lugareños estén tan felices de tenernos con ellos como nosotros de poder estar allí”.


Una mano amiga

Los tres centros turísticos aceptan donaciones para financiar su trabajo de conservación y sus iniciativas comunitarias. Cómo ayudar:

  • Lembeh Foundationlembehfoundation.org
    La fundación Lembeh Foundation acepta donaciones en general, pero las personas también pueden designar su contribución a escuelas locales, hogares y familias o personal del centro turístico.
  • Misool Foundationmisoolfoundation.org
    La fundación Misool Foundation utiliza fondos para beneficiar su programa de reciclaje y respaldar a la Patrulla de Guardaparques de Misool (Misool Ranger Patrol).
  • Programa de Colaboración para la Conservación de Arrecifes de Wakatobi (Wakatobi Collaborative Reef Conservation Program)
    Las donaciones ayudan a proporcionar a la población local una fuente sustentable de desembolsos de arrendamientos regulares.

Explore más

La Fundación Misool, la Fundación Lembeh, el Programa de Colaboración para la Conservación de los Arrecifes de Wakatobi y la Bilikiki liveaboard ayudan a los esfuerzos de conservación y apoyan a la gente de sus comunidades locales.

https://youtu.be/7Fix01JflDQ

© Alert Diver - Q2 2021

Spanish