Todos los años se producen incendios y roturas en el equipo de buceo, los rebreathers y los cilindros de oxígeno. Estos incidentes provocan daños a la propiedad y lesiones, mutilaciones e incluso la muerte de operadores de estaciones de llenado de cilindros, así como también de buzos y espectadores inocentes.
La seguridad de los cilindros de gas de alta presión es un objetivo primordial de las autoridades reguladoras de todos los países. La Occupational Safety and Health Administration, OSHA (Administración de Seguridad y Salud en el Trabajo), de los Estados Unidos y los organismos gubernamentales similares de otros países definen a todos los contenedores de alta presión como material peligroso (hazmat) o con la designación equivalente de su país. Según estas normas, los inspectores de cilindros deben recibir una capacitación formal específica.
Los operadores de estaciones de llenado y los usuarios deben tener plena conciencia, recibir capacitación y actuar con prudencia a fin de ayudar a evitar un accidente que se puede convertir en una de las desafortunadas estadísticas.
Normas y seguridad de los cilindros
El Departamento de Transporte de los Estados Unidos (DOT, por sus siglas en inglés), Transport Canada (TC) y la Organización Internacional de Normalización (ISO, por sus siglas en inglés) exigen que los cilindros sean diseñados, fabricados, inspeccionados y certificados de conformidad con estrictas normas de ingeniería. Es posible que los países tengan normas adicionales en relación con la idoneidad de las personas que manipulan cilindros. Estas normas y documentos normativos proporcionan márgenes de seguridad para garantizar un uso seguro de los cilindros durante décadas, siempre que se utilicen dentro de las condiciones previstas. La industria de las bebidas, por ejemplo, utiliza cilindros de alta presión, con más de 70 años de antigüedad, de manera segura.
El usuario debe utilizar el cilindro dentro de los parámetros de diseño, como por ejemplo llenarlo solo hasta la presión nominal de servicio, someterlo a una inspección realizada por técnicos competentes y que hayan recibido una capacitación formal y procurar que vuelva a ser clasificado por un centro de pruebas prestigioso y reconocido. Más del 90 por ciento de las roturas se produce durante el llenado, por lo que realizar una inspección diligente durante este proceso es crucial. Los cilindros funcionarán de manera segura a lo largo de toda su vida útil si los usuarios cumplen con las condiciones de diseño y funcionamiento.
Por qué se rompen los cilindros
Rara vez podemos garantizar que un cilindro no ha estado expuesto a algún tipo de llenado excesivo, maltrato físico o inspección inadecuada. Cuando los cilindros son utilizados más allá de sus límites de presión permitidos, la posibilidad de que se produzca alguna falla aumenta considerablemente. Un llenado excesivo habitual cerca de la presión de prueba hidrostática, o superior a ella, eventualmente puede causar una deformación y provocar la incapacidad del cilindro para soportar incluso la presión de trabajo aceptable.
Exponer cilindros llenados en exceso a altos niveles de calor —como sucede en el interior del maletero de un automóvil, que en algunos lugares puede alcanzar los 94°C (200°F) en el verano— aumenta la presión interna considerablemente. Los cilindros de aluminio son particularmente susceptibles a cambios metalúrgicos al exponerlos a temperaturas superiores a los 60°C (140°F) durante un largo período, lo que puede causar daños estructurales en el metal.
La corrosión interna de los cilindros, combinada con una falta de inspecciones visuales internas obligatorias, con el tiempo puede crear un espesor inadecuado de la pared y su posterior rotura. Los cilindros que no están bien limpios o que no tienen las válvulas apropiadas y que han sido llenados con una mezcla respiratoria enriquecida con oxígeno pueden explotar debido a un incendio en su interior. El consenso de las normas internacionales es que el gas enriquecido con oxígeno contiene más de un 25 por ciento de oxígeno. Es importante destacar que los cilindros no siempre fallan, incluso cuando se usan con equipo sucio o inadecuado. No obstante, las especificaciones técnicas indican que es probable que haya fuego si se produce una de varias causas de incendio, muchas de las cuales pueden no ser evidentes para el usuario promedio.
El deterioro mecánico en el exterior del cilindro es más fácil de detectar. Los daños provocados por la combinación incorrecta de cilindros y conexiones roscadas de válvulas son mucho más difíciles de ver y han causado varios accidentes devastadores.
El cilindro de buceo promedio contiene más de 1 millón pie-libra fuerza, que guarda correlación con la energía cinética de un camión de 3 toneladas que se desplaza a 113 km/h (70 mph). La posible liberación de esta cantidad de energía en la rotura de un cilindro requiere que los usuarios entiendan perfectamente cómo manipular un cilindro de manera segura.
Cómo garantizar la seguridad de los cilindros
Unos pocos pasos sencillos pueden reducir enormemente su probabilidad de convertirse en una estadística. Un paso clave consiste en asegurarse de que la inspección y las pruebas de los cilindros sigan las normas nacionales o locales.
Después de cada buceo, purgue los cilindros una vez que haya quitado el regulador para evitar que quede humedad atrapada en la válvula e impedir que ingrese al cilindro al realizar el siguiente llenado.
Purgue las mangueras de llenado antes de cada llenado, especialmente si son almacenadas de una manera que pueda permitir el ingreso y la acumulación de humedad, como puede suceder en entornos húmedos. Almacenar las mangueras con el extremo de salida apuntando hacia abajo ayudará a evitar el ingreso de partículas de suciedad en el cilindro, que de otra manera podría causar la erosión o incluso la ignición de gases enriquecidos con oxígeno.
Para ayudar a que el metal conserve su resistencia, almacene los cilindros en un lugar fresco y seco que impida el contacto con alguna fuente de calor directa. Almacene los cilindros que no se utilizarán por 90 días o más casi vacíos, en torno a la primera lectura en el manómetro, que normalmente se encuentra entre 100 y 200 psi (10 y 20 bares). Manténgalos bien sujetos en una posición vertical con la válvula completamente cerrada.
Examine los cilindros para comprobar la presencia de daños mecánicos, tales como marcas o surcos, o evidencia de daños en las válvulas causados por un uso brusco o por las acciones de buzos menos informados. Las roturas rara vez se producen al dejar caer o golpear los cilindros, pero el daño de las válvulas con frecuencia es la causa de lesiones o muertes.
No utilice un cilindro si observa algún tipo de corrosión o daño mecánico evidente, si tiene algún motivo para sospechar de inspecciones obligatorias inadecuadas, o que dichas inspecciones no se han realizado, o si la válvula del cilindro parece contaminada con algún lubricante con un olor desagradable. Si se trata de un cilindro alquilado, regréselo a la tienda; si es de su propiedad, lléveselo a un inspector capacitado independientemente de la fecha que figure en la etiqueta de inspección visual.
Asegúrese de abrir las válvulas de los cilindros lentamente y con cuidado, tanto si utiliza oxígeno como cualquier otra mezcla de aire enriquecido Nitrox (Nitrox). Una válvula pegajosa puede suponer un desafío y es posible que requiera atención de manera urgente.
Mantener sus cilindros como corresponde y cuestionar cualquier problema posible que observe incrementará el nivel de seguridad. Puede aumentarlo aún más si cuenta con operadores capacitados que realicen inspecciones informales durante el proceso de llenado. Una inspección visual y una reclasificación adecuadas realizadas por inspectores con una capacitación formal ofrecen un grado mayor de seguridad. Los accidentes son la acumulación de muchas fallas; la seguridad es la acumulación de muchos niveles de diligencia.
Francois Burman es director de mitigación de riesgos de DAN. Mark Gresham es presidente y CEO de PSI-PCI, una agencia que se dedica a capacitar a inspectores de cilindros.
© Alert Diver —primer trimestre 2021.