Estoy agradecido por la información de seguridad que DAN publica, sus recomendaciones de médicos expertos en medicina de buceo y la tranquilidad que su obertura ofrece. Mi esposa Julie y yo hemos tenido una cobertura de DAN por muchos años y somos afortunados de habernos comunicado con DAN por una emergencia en una sola oportunidad —13 años atrás cuando un pez león picó a Julie—. Nuestros buceos se habían desarrollado sin incidentes aparte de eso, pero nuestro último viaje a Pequeña Caimán fue diferente.
Julie y yo somos compañeros de buceo y buzos de aguas abiertas con más de 800 buceos realizados. Vivimos en Denver, Colorado, pero somos afortunados de haber podido viajar y bucear en lugares de clase mundial. Algunos buceos han sido difíciles, con corrientes significativas o temperaturas bajas.
En general nuestro objetivo es hacer dos viajes de buceo por año —uno a algún destino lejano o complejo, como Raja Ampat, y otro al Caribe—. Nos encanta Pequeña Caimán particularmente por su relativa facilidad, el ambiente relajado, los espectaculares arrecifes y el fantástico Bloody Bay Wall. En mayo de 2024 partimos de la nevada Denver para bucear por un par de semanas en la cálida y bella Pequeña Caimán.
Teníamos previsto aprovechar las condiciones impecables con tres buceos por día —todos buceos de no descompresión con Nitrox con paradas de seguridad e intervalos de superficie apropiados—. Un típico día consistía en un viaje en barco por la mañana para realizar dos buceos, regresar al muelle para almorzar y luego hacer un buceo vespertino.
El primer buceo de cada día era el más profundo, pero respetando los límites, con ascensos lentos y una parada de seguridad final antes de salir a la superficie. Después de pasar un intervalo de superficie de una hora viajando a un segundo punto y disfrutar de algún bocadillo e hidratarnos, hacíamos el siguiente buceo. El tercer buceo tenía lugar después de un intervalo de superficie de dos horas o dos horas y media, y luego pasábamos el resto de la tarde relajándonos antes de cenar temprano e irnos a la cama.
Siempre nos aseguramos de mantenernos hidratados, y nuestros niveles de oxígeno y saturación habían estado bien. No tuvimos ningún problema hasta el noveno día de buceo. Esa mañana todo se desarrolló normalmente, con un primer buceo a 26 metros (85 pies) por un minuto a máxima profundidad. El segundo buceo nos llevó hasta los 18,3 metros (60 pies), pero pasamos la mayor parte del tiempo sobre el arrecife a aproximadamente 6 metros (20 pies). Después del almuerzo hicimos uno de los buceos más increíbles de nuestras vidas, donde disfrutamos de una maravillosa interacción con langostas espinosas del Caribe en una extensión de arena a 14,3 metros (47 pies), nuestra profundidad máxima, acompañados por nuestro divemaster. También había una hermosa raya águila alimentándose en el lugar y pasamos 15 minutos siguiéndola y observándola apaciblemente antes de que se alejara.
Hicimos un ascenso apropiado para realizar una parada de seguridad de tres minutos a lo largo del cabo de amarre a 4,6 metros (15 pies), después de la cual regresé a la embarcación para orinar. Julie y el divemaster me siguieron poco después y luego nos dirigimos al muelle.
Aproximadamente 10 minutos después de subir a la embarcación, empecé a experimentar un dolor muscular en la parte inferior del pecho, la pierna derecha sufrió una pérdida de la función motora y supe que estaba en problemas. Nuestro divemaster inmediatamente me administró oxígeno, pidió ayuda por radio y nos llevó al muelle en tiempo récord. Me trasladaron a la clínica de la isla, donde una enfermera muy eficiente siguió administrándome oxígeno, me tomó los signos vitales, hizo un electrocardiograma y me preguntó sobre mis síntomas. Se mantuvo permanentemente en contacto con DAN y un médico en Cayman Brac. El médico de DAN nos guio a mí y a la enfermera a través de las fases agudas del tratamiento de la enfermedad por descompresión (EDC), me ayudó a decidir sobre mi atención y me proporcionó un recurso muy necesario con un conocimiento profundo sobre la EDC.
El tratamiento hizo que mis síntomas desaparecieran rápidamente: el dolor en el pecho desapareció y recuperé el control de mi pierna. Tanto el médico de DAN como la enfermera insistieron en que continuara con la terapia con oxígeno por otras cuatro horas. Ya que había terminado con el buceo por este viaje, regresé a la clínica a la mañana siguiente para un seguimiento. Insistí para que Julie continuara buceando mientras yo me relajaba y leía hasta que nos fuimos de la isla tres días más tarde.
En DAN se mantuvieron en contacto durante todo el viaje y fueron atentos y serviciales en numerosas llamadas y mensajes de correo electrónico. Tras regresar a casa, visité a un médico experto en medicina de buceo recomendado por DAN para que me realizara una evaluación de aptitud física para el buceo completa y me autorizó a reanudar la práctica de buceo. El apoyo de DAN no terminó allí, ya que siguieron respondiendo mis preguntas y me orientaron en la planificación de mi siguiente buceo.
En todos mis años de buceo nunca había experimentado una EDC antes de ese episodio, y espero no tener que vivirlo nunca más. Hicimos todo bien en relación con nuestros perfiles, liberación de gases, hidratación y descanso. Julie y yo hemos buceado en condiciones más extenuantes sin tener ningún incidente y nunca tuvimos señales de advertencia en buceos anteriores. No pudimos identificar una causa específica, pero después de consultar a DAN y el médico experto en medicina de buceo, tenemos previsto hacer ajustes en futuros viajes para tener días libres completos durante viajes de buceo de varias semanas y reflexionamos sobre cómo podemos bucear de una manera incluso más conservadora.
Poder contar con DAN como un recurso a disposición hizo que esta experiencia fuera mucho mejor de lo que podría haber sido. Estoy sumamente agradecido a los miembros del personal de DAN por su profesionalismo, capacidad de respuesta y alto nivel de competencia y habilidades.
Siempre hemos adquirido una cobertura contra accidentes de buceo de DAN y me sentí especialmente agradecido de tenerla cuando necesitamos ayuda. En DAN sin duda nos brindaron ayuda y eso realmente marcó la diferencia.
© Alert Diver – Q3 2024