Cilindros de descompresión, de etapa y de emergencia

La planificación de gas con cilindros es crucial para cerciorarse de que un buzo tenga una mezcla respiratoria adecuada para llevar a cabo su buceo de manera segura. JILL HEINERTH.

EN LA INDUSTRIA DEL BUCEO, términos diferentes a veces pueden describir la misma pieza del equipo. Lo que algunos buzos conocen como luz de buceo, por ejemplo, otros pueden conocerla como linterna de buceo. Son físicamente idénticas, así que los nombres son intercambiables sin causar, como mucho, más que una mínima confusión.

Los buzos también pueden intercambiar terminología —casualmente o por error— para dos piezas del equipo que son diferentes, como una bobina y un carrete. Los carretes contienen bobinas, pero las bobinas son funcionalmente diferentes a los carretes, por lo que el término que utilice es relevante para el dispositivo, su funcionamiento y su aplicación.

En algunos casos, una pieza del equipo tiene varios usos. Los buzos pueden describir el mismo objeto como un cilindro de descompresión, un cilindro de etapa o un cilindro de emergencia. Si bien cada cilindro puede ser físicamente idéntico, los usos y la capacitación necesaria para cada uno de ellos son sumamente diferentes. Por consiguiente, los buzos deben tener cuidado de elegir el identificador correcto para cada pieza del equipo.

SIMILITUDES DE LOS CILINDROS

Las botellas de descompresión, las botellas de etapas y las botellas de rescate son utilizadas principalmente por los buceadores técnicos durante inmersiones complejas en las que intervienen diversas mezclas de gases y, potencialmente, varias botellas. Los buceadores técnicos las llevan además de la configuración del equipo principal -como las dobles, las de montaje lateral o un rebreather- que tienen previsto utilizar durante una inmersión. Cuando se bucea con estas botellas se necesitan técnicas especiales de planificación de gases para garantizar que, incluso en caso de fallo catastrófico, todos los buceadores puedan volver a la superficie con seguridad. 

Los tres cilindros pueden tener un tamaño idéntico y técnicas de montaje correspondientes en común. Un cilindro de aluminio de 11,1 litros (80 pies cúbicos) es el más común. A veces los buzos usan cilindros de aluminio de 5,7 litros (40 pies cúbicos) tanto para la descompresión como para una emergencia y en ocasiones pueden usar cilindros de aluminio de 10 litros (72 pies cúbicos) como etapas. Los buzos rara vez usan cilindros de acero debido a sus características de flotabilidad negativa. Independientemente del tamaño, el montaje normalmente es similar, con pequeñas variaciones de un buzo a otro para satisfacer las necesidades individuales.

Los buzos con rebreathers llevan cilindros de emergencia en caso de una falla catastrófica del circuito cerrado que los obligue a realizar un cambio a un circuito abierto.
JILL HEINERTH

DIFERENCIAS DE LOS CILINDROS

Cilindros de descompresión: como indica el nombre, estos cilindros contienen gas que los buzos utilizan durante buceos de descompresión por etapas, lo que incluye paradas a diferentes profundidades por lapsos de tiempo predeterminados antes de salir a la superficie para permitir una liberación de gases eficiente. El gas de descompresión habitualmente contiene más de un 40 por ciento de oxígeno, y un buzo puede llevar más de una mezcla de descompresión en buceos más largos y más profundos.

En entornos no cubiertos, los buceadores suelen llevar botellas de descompresión durante toda la inmersión y respiran de ellas tras alcanzar una profundidad segura para la profundidad máxima operativa (MOD) de la mezcla. Los buceadores intentan evitar dejar caer estas botellas cuando bucean en aguas abiertas para poder ascender en cualquier momento de la inmersión si surge una emergencia.

En entornos con estructuras situadas por encima de la cabeza como las cuevas, la mayoría de los buzos dejan sus cilindros de descompresión al comienzo del buceo para usarlos cuando llegan a la salida. Esta práctica es aceptable porque normalmente se entra y se sale por el mismo lugar.

Cilindros de etapa: Las botellas de escenario permiten a los buceadores aumentar la distancia de penetración en un entorno elevado, como una cueva, un pecio o una mina. Los buceadores respiran de botellas que colocan a intervalos predeterminados a lo largo de su recorrido. Algunos buceadores sueltan estas botellas en función de la presión, mientras que otros lo hacen en función del tiempo. Al salir, los buceadores recogen las botellas y las utilizan. Independientemente del método de gestión de gases de los buceadores, todos los miembros del equipo deben acordar un procedimiento antes de iniciar la inmersión.

Cabe observar que las condiciones ambientales pueden afectar un procedimiento elegido, como, por ejemplo, llevar un cilindro de etapa más lejos en sistemas de cuevas de alto flujo para tener el gas más fácilmente disponible en caso de que se necesite rápidamente.

Cilindros de emergencia: Los buceadores de rebreather utilizan botellas de rescate en caso de que un fallo catastrófico del circuito obligue a cambiar a circuito abierto. Los buceadores deben tener en cuenta la MOD del gas de la botella de rescate, ya que deben poder respirarlo a la profundidad máxima prevista para la inmersión.

Asegurarse de la profundidad máxima operativa de un gas es importante para su uso seguro.
JILL HEINERTH

A diferencia de los cilindros de etapa, los buzos llevan cilindros de emergencia durante todo el buceo para acceder a una mezcla respiratoria inmediatamente si se produce una falla de un rebreather. Algunos planes de buceo para entornos con estructuras situadas por encima de la cabeza incluyen colocar cilindros de emergencia adicionales a distancias predeterminadas. Un buzo siempre debe tener gas suficiente para el tiempo de traslado necesario para desplazarse de manera segura hasta su siguiente cilindro ubicado anteriormente. La mejor práctica consiste en que cada buzo lleve suficiente gas de emergencia para realizar un autorescate y regresar a la superficie de manera segura por sus propios medios.

En general, los buceadores deben seguir siempre las recomendaciones de su organismo de formación...

REFLEXIONES FINALES

Los buzos necesitan capacitación extra para llevar una mezcla respiratoria adicional. Ya sea que se trate de cilindros de descompresión, de etapa o de emergencia, cada uno de ellos requiere capacitación adicional. Los buzos pueden hacer cursos de procedimientos de descompresión, penetración de naufragios o buceo en cuevas para ampliar sus habilidades y conocimientos. Aunque estos cilindros pueden ser similares respecto al tamaño y el montaje, cada uno tiene una función única dentro de un plan de buceo. Es importante destacar que los buzos pueden llevar más de un tipo de cilindro en un buceo determinado, como, por ejemplo, cilindros tanto de etapa como de descompresión en un buceo en cuevas con circuitos abiertos.

En general, los buceadores deben seguir siempre las recomendaciones de su organismo de formación y mantenerse dentro del ámbito de su formación para garantizar que cada inmersión sea lo más segura posible. Los buceadores deben esforzarse por comprender la terminología y utilizarla adecuadamente. Hacerlo ayuda a disminuir la confusión, lo que en última instancia aumenta la seguridad del equipo.

Los cilindros de descompresión, los cilindros de etapa y los cilindros de emergencia son piezas del equipo diferentes, y hacer referencia a cada tipo de manera correcta garantizará que todos conozcan su uso previsto.

© Alert Diver - Q4 2022

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